Actualizado el 23 agosto, 2025 en Novedades, Sin categoría

Dr. Víctor Ruggieri: La importancia del diagnóstico temprano y el abordaje personalizado en el autismo

Con una notable afluencia de público, se llevaron a cabo las 1° Jornadas de Autismo en el Parque Saavedra de Comodoro Rivadavia, con la presencia destacada del Dr. Víctor Ruggieri. El reconocido neurólogo infantil y consultor honorario del Hospital de Pediatría Garrahan, compartió su experiencia y conocimientos, enfatizando la crucial importancia del diagnóstico temprano y un abordaje terapéutico individualizado para las personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA).

Diagnóstico: Un trastorno del neurodesarrollo que no aparece en la adultez

Durante su disertación, el Dr. Ruggieri explicó que el autismo es un trastorno del neurodesarrollo, lo que significa que sus manifestaciones deben estar presentes en la infancia. “Uno no debuta con autismo a los 20 o 25 años”, afirmó. Si una persona muestra problemas de aislamiento o emocionales en la adolescencia o adultez, es importante investigar si hubo signos de dificultades en la cognición social, la comunicación o la interacción durante sus primeros años. De lo contrario, se debe considerar otras condiciones como la depresión o el hostigamiento.

El neurólogo subrayó la importancia de la detección temprana. Se habla de signos de riesgo hasta los 30 meses de edad. “Si a los 12 o 18 meses un chico no señala, no mira a lo señalado, no responde a su nombre o no tiene un buen contacto visual, hay que trabajar”, señaló Ruggieri. Aunque a esa edad aún no se puede confirmar el diagnóstico de autismo, la intervención temprana es fundamental para estimular la comunicación y la interacción social.

Dr. Víctor Ruggieri

El rol de la tecnología y la intervención temprana

El Dr. Ruggieri advirtió sobre el uso de la tecnología en niños pequeños. Aunque las pantallas por sí solas no causan autismo, pueden empeorar el aislamiento en un niño que ya muestra signos de riesgo. “Un niño con autismo se aísla mucho más si uno lo deja con las computadoras o el iPad”, explicó. Sugirió que, en general, se eviten las pantallas antes de los 4 años y se limiten a no más de una hora diaria entre los 3 y 4 años. En todo caso, recalcó que los niños no deben estar solos y aislados mientras las usan.

En cuanto al abordaje terapéutico, Ruggieri destacó que el objetivo principal es ayudar al niño a disfrutar de la socialización y la comunicación. Hizo hincapié en el papel fundamental de los padres. “El abordaje del niño con autismo no es a puertas cerradas con el terapeuta”, dijo. La participación de al menos uno de los padres en las sesiones es esencial para que puedan aprender a generalizar las habilidades fuera del consultorio.

Un abordaje personalizado y un desafío de por vida

El especialista enfatizó que cada tratamiento debe ser un “traje a medida” para cada niño, adaptándose a sus características, edad, habilidades y debilidades. Los conocimientos y los modelos de abordaje científicos son la base, pero su aplicación debe ser flexible y ajustada a las necesidades individuales.

Para finalizar, el Dr. Ruggieri abordó el acompañamiento a lo largo de la vida de las personas con TEA, indicando que el apoyo es necesario en todas las etapas, aunque las necesidades varían. El gran desafío, a su juicio, es la toma de conciencia social para trabajar no solo en la intervención temprana, sino también en la escolaridad, la vida adulta y la integración plena de las personas con autismo.